Crear un espacio para las tareas ayudará a crear hábitos saludables en la rutina de estudio de los pequeños y no tan pequeños.
Si bien el espacio perfecto para la tarea es diferente para cada niño, te proponemos unos sencillos pasos para crear espacios, sin distracciones y que promueven un entorno de aprendizaje todo el año.
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Considera la edad, la personalidad y el estilo de aprendizaje
Los preescolares y los estudiantes de secundaria tendrán diferentes requisitos cuando se trata de espacios, así que asegúrate de que su diseño sea apropiado para su edad. Los más pequeños necesitan muebles más pequeños y fácil acceso a su material escolar, sin embargo los más mayores necesitan estar cerca de una toma de corriente para conectar sus equipos informáticos.
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Prioriza la comodidad
Una vez que haya elegido el lugar perfecto, asegúrate de que el espacio mantenga a su hijo cómodo, pero también comprometido y alerta. Por ejemplo, aunque las camas son cómodas, no son la mejor base de tareas. Tu hijo puede alejarse durante una tarea, y trabajar desde la cama puede incluso afectar negativamente la calidad del sueño, la productividad, el estado de ánimo. Una buena silla ergonómica proporciona todos los beneficios sin las repercusiones importantes. Mientras lo haces, asegúrate de que la superficie de escritura esté a la altura correcta, el monitor del ordenador esté a una distancia adecuada.
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Añade mucha iluminación
La mala iluminación puede provocar fatiga visual, dolores de cabeza y fatiga. Combinar la luz natural con lámparas de pie y de mesa, proporcionará a tu hijo mucha flexibilidad cuando se trata de iluminar adecuadamente su estación de trabajo.
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Abastecerse de material escolar
Una vez que lo básico esté en su lugar, puedes comenzar a revisar el espacio de la tarea. Querrás volver a examinar la edad y las necesidades específicas del niño, utensilios para escribir, libros y un calendario son un ejemplo de lo que siempre necesitan. En caso de duda, consulta con el maestro de tu hijo. Te informará sobre qué tipo de material escolar son imprescindibles.
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Personaliza el espacio
Una vez que los muebles, la iluminación y el material escolar estén en su lugar, podéis agregar algunos toques personales divertidos. Incorporar su color favorito, algunas obras de arte que han hecho, un póster que les encanta u otra decoración que pueda ayudarlos a disfrutar un poco más del espacio.
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Elimina las distracciones
Querrás preparar a tu hijo para el éxito, y eso a menudo incluye minimizar las perturbaciones. Dependiendo de la edad, puedes pedirle a tu hijo que apague o entregue su teléfono durante el horario de la tarea, apague el televisor o incluso instale controles parentales en los dispositivos problemáticos.
Priorizar las tareas escolares en casa puede marcar una gran diferencia. Y con estos consejos ¡estudiar podría convertirse en un rato divertido para los estudiantes de la casa!
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